Cambiamos de protagonista.
Pasamos de uno de los reyes de Barajas a uno de los peques del aeropuerto madrileño.
Pasamos de Boeing a Embraer.
Y pasamos de Aerolíneas Argentinas, a PGA (compañía que nunca he sabido si tiene o no que ver con TAP).
Pasamos de un avión muy bonito, a un avión que tiene su encanto, casi por ser diferente a lo que estamos acostumbrados últimamente.
Mola este pequeñajo.
Además la foto también me gusta. Primero porque salió muy nitida, algo que para ser yo ya es mucho; segundo porque la tarde dejó muchas nubes, y ese contraste me gustó: el avión en sombra, al fondo la luz del sol luce con fuerza. Y tercero porque en config. Sur, el aeropuerto madrileño puede dejar muy buenas estampas de aviones cruzándose en las pistas.
Pasamos de un grandote a un canijo.
Es el Embraer ERJ-145, CS-TPI, de Portugalia Airlines.
Hay más aún en cola, eh???
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